jueves, 26 de julio de 2012

Relativizar

A veces somos tan ingenuos que nos creemos desafortunados, condenados a algo, etc. cuando en realidad no tenemos ni idea de lo que sería que eso realmente suceda.
Nos convencemos y creemos que lo que nos pasa es algo terrible y que nada, absolutamente nada puede asemejarse a semejante sufrimiento. Y está bien, la intensidad con la que vivimos las cosas, es relativa y depende de la persona que la viva y de la importancia que uno le da a eso que está sucediendo.
Pero aun ante lo relativo de la intensidad, es necesario salirnos de nuestra persona aunque sea por dos segundos y pararnos desde afuera, o preguntarle al de al lado, para que nos diga como lo ve, que siente, como cree que lo estamos viviendo.
Cada uno vive las cosas como las vive, algunos con mas distancia otros con mas sufrimiento, pero no esta bien ser tan frio, ni esta bien ser tan intenso y sufrir porque se nos cayó un vaso de agua.
Nuestros juicios infundados, nuestras miradas distorsionadas, nos llevan a lugares a donde no deberíamos ir.
Relativizar el dolor, poner en comparación con otras cosas que pasan, mirar lo mismo desde otro lado o que otra persona lo vea.

1 comentario: